Gukgeuk

La misma tarde del 17 de marzo de 2013, cuando en un convulso congreso UPN decidió seguir apostando por Yolanda Barcina como presidenta, este que escribe tuiteó en su cuenta: “Buena noticia para Navarra. UPN se suicida…“.

Desde entonces las buenas noticias para Navarra se han sucedido. Todas las fuerzas políticas que en los últimos 40 años han pilotado o apoyado el Régimen pseudoforal y graznado la gran mentira de la Navarra foral y diferenciada, mientras esquilmaban los restos de su soberanía hasta casi hacerla desaparecer, incluso otras fuerzas surgidas estos últimos años que abiertamente abogaban por su definitivo entierro; todas estas fuerzas digo, parecen empeñadas en una loca carrera por inmolarse.

Desde el mencionado congreso cainita de UPN, pasando por la increíble reposición protagonizada por el PSN en Marzo de 2014 de su afamado sainete “Agostazo de 2007” y por la pelea en el escueto gallinero magenta entre sus 2 gallos, llegando finalmente a la defenestración por parte de las bases de Podemos de los huevos de cuco con los que UPN estuvo a punto de colonizar el nido podemita…. todo haría creer en una conjunción de astros que finalmente enviaba un mensaje claro: “Si los navarros no sois capaces ahora de cambiar este régimen podrido, es que os merecéis lo que tenéis”. (13 julio de 2014)

En Mayo de 2015 las buenas noticias se siguen sucediendo. En las elecciones municipales y forales los partidos del régimen presentan cabezas de lista de tercer nivel, lemas de campaña “Navarrísimos”, candidatas en mallas bailando en la Plaza del Castillo, programas electorales paupérrimos, neonazis infiltrados entre los candidatos y, finalmente, las posibilidades que el ex UPyD y ahora cabeza de lista de C’s Diego Paños pudiera tener, se esfuman por culpa de …Diario de Navarra!

Llegan los resultados y los hados siguen siendo favorables hasta el último minuto: La debacle electoral del partido hasta ahora gobernante es espectacular. No sólo en el plano parlamentario. A nivel municipal pierde Iruña, todas las alcaldías de las capitales de Merindad y las de las cabeceras de comarca, hasta el punto de que después de las elecciones el mayor cargo institucional que mantiene es la alcaldía de Cintruenigo. Ciudadanos no accede al parlamento por 200 votos con lo que las fuerzas contrarias al cambio pierden la mayoría y el Parlamento de Navarra se libra, por ahora, de un orco antiforal de primera. E incluso llega la guinda: Geroa Bai vence entre las fuerzas del cambio y se gana el derecho a liderarlo.

Y este no es un detalle menor. Que nadie dude de que si esos 5.000 votos de diferencia hubiesen sido a favor de otra fuerza, el Gobierno del Cambio no se hubiese concretado.

Hoy, por primera vez en toda su larga historia, Navarra tiene un Gobierno de progreso, un Gobierno que no es deudor de voluntades ajenas a Navarra y a los navarros. A todos los navarros.

Ni los últimos gobiernos pseudoforalistas hispanófilos, ni las anteriores diputaciones franquistas, ni las previas, devenidas de las élites agrarias, ni siquiera los mitificados reyes de la Navarra independiente, han gobernado para el pueblo navarro sino para sí mismos o para sus castas. Con mayor o menor nivel de despotismo, ilustrado o no, pero nunca para todos los navarros. Por eso estaban tan justificadas las palabras de Koldo Martinez durante la sesión de investidura, palabras que pocos entendieron en todo su significado: “Por fin somos, por fin existimos”.

Pues bien. La historia y la fortuna nos han dejado en este punto. No digo que la suerte nos haya regalado nada a los navarros, nunca lo ha hecho. Desde hace 800 años, en todos los conflictos en que los navarros como país hemos estado involucrados, incluidas varias dolorosísimas guerras civiles, o hemos perdido o hemos elegido el bando equivocado. Pero hoy, con esta oportunidad ganada a pulso por la pelea, el trabajo, la voluntad y hasta la vida de muchos navarros de muchas generaciones, los que tenemos la fortuna de vivir este tiempo sentimos hoy la alegría de tener, por fin, el destino en nuestras manos, …y algunos sentimos también el miedo de perder esta ocasión.

Porque no vamos a tener otra oportunidad. Sólo nos van a dar esta. Y si no la aprovechamos volverán a pasar generaciones antes de que aparezca otra …si aparece.

La Navarra negra de los que llevan decenios ladrando en nombre de la supuesta Navarra foral y, sobre todo, española. La que se sacude la culpa de padres y abuelos proclamando su inocencia, pero sin molestarse en condenar sus tropelías y aún menos renunciar a su heredado patrimonio, fruto del expolio. Esa Navarra que se esconde detrás de

un escudo con cadenas diciendo defender la inexistente Navarra eterna cuando sólo defiende sus privilegios de clase, se ha retirado a lo más profundo de sus cavernas a lamerse las heridas y ha dejado de guardia a cuatro saltimbanquis para tenernos distraídos.

Que nadie se piense que esa Navarra ha pasado a la historia. Esa Navarra endogámica y parásita sigue al mando, ha sido desalojada del Gobierno Foral y de los Ayuntamientos, pero sigue incrustada entre el alto funcionariado, en las agencias y servicios públicos, en los consejos de administración de las grandes corporaciones navarras nacidas al calor del régimen franquista, en algunos medios de comunicación, en las organizaciones empresariales, en las mafias sindicales de todo pelo y en todos esos organismos que llevan décadas, que ya parecen siglos, chupando de la ubre de los presupuestos oficiales. Ellos, tan liberales. Sigue incrustada en todo el aparato que el Estado tiene acantonado en Navarra, ingente, carísimo y perfectamente prescindible, pero pagado a escote entre los contribuyentes navarros.

Sigue finalmente incrustada en esta Iglesia Navarra, expoliadora de bienes y haciendas, que inscribe a su nombre todo lo que se le antoja, sin pagar IBIS, reparaciones ni mantenimientos, que acoge en su seno grupos ultras, que permite todos los meses misas en homenaje a asesinos fascistas y a cuyo frente tiene un capellán castrense.

Algunos hemos sentido escalofríos con las imágenes que se han visto no hace mucho. Gente rezando el rosario de rodillas en sitios públicos, manifestaciones cruz al hombro, vivas a Cristo Rey, amenazas de muerte al alcalde de Pamplona… Bienvenidas sean esas imágenes para despabilar la inocencia de algunos. Está bien saber que es lo que tenemos enfrente.

A todo esto y a bastante más es a lo que el Gobierno del Cambio se está enfrentado. El cambio está todavía muy lejos, lejísimos y su logro aún es incierto. Y en todo caso no se alcanzará en una sola legislatura, quizá sea necesaria toda una generación, 5 o 6 legislaturas, para conseguirlo. Lo contrario supondría una catarsis, circunstancia que históricamente ocurre muy pocas veces en una sociedad.

Así pues, tranquilidad. Los revolucionarios de boquilla y pintxopote que empiezan a ponerse nerviosos porque aún no se ha tomado el Palacio de Invierno, si no son capaces de mantener el temple, que no estorben y que vayan a relajarse a una Casa Rural. Esos que adornan sus programas electorales con el derecho de todos los navarros a estudiar en euskera y en toda Navarra, pero cuando se empiezan a poner los medios para alcanzar el objetivo les tiemblan las piernas, que vuelvan a mirar el mapa y decidan si van en esa dirección o en la contraria. Y para los que se han subido al el tren en marcha y ya están reclamando al maquinista, la receta del viejo estellés: “Los conversos a la cola”.

Porque el trabajo es ingente y algunos parece que no tienen claro cuales son los objetivos.

…pero eso ya es tema para otro post.

@gukgeuk_151201

Imágenes: Propia, infovaticana.com, Jose Ramón Urtasun, Patxi Cascante, Noticias de Navarra.